Desde el 11 de febrero de 2020, la despenalización de la eutanasia en España, se convertiría en el primer paso hacia el objetivo final de Pedro Sánchez, ya que fue una de las grandes promesas.
La eutanasia se define como la acción que permite o provoca la muerte de un paciente terminal.
Esta omisión, que acelera el final de la vida de un individuo, es una gran solución para aquellas personas que pretenden acabar con la agonía, puesto que, en algunas situaciones, la calidad de vida se ve afectada y el principio de beneficencia se muestra indeciso.
Al aceptar la eutanasia estamos respeteando la autonomía y el derecho a decidir sobre su propia vida al enfermo o enferma.
Uno de los ejemplos de países, que han aceptado esta cuestión, es Países Bajos, donde los profesionales consideran positiva la despenalización de la eutanasia y siguen una serie de parámetros marcados.
Como conclusión, se puede afirmar que la eutanasia genera una gran controversia y que para apoyarlase tienen que tener en cuenta una serie de factores, tales como, no dejar influenciarse por concepciones religiosas o morales, lo cual es difícil, pero se considera que al existir un derecho a la vida, existe por ende un derecho a la muerte.
Ángela Prieto
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